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Mito
1: Es una ciencia fácil de aprender.
Los
expertos coinciden en que se trata de una
disciplina que requiere años intensos de estudio y
de perfeccionamiento. “Mis amigos y colegas no se
podían creer que tuviera que estudiar botánica y
química mientras estaba aprendiendo todo sobre la
aromaterapia”, explica Valerie Bennis, la
dueña de Essence of Vali, una compañía
especializada en la ciencia de los aromas. “La
mayoría de la gente piensa que cualquiera puede
realizar una mezcla de aromaterapia con efectos
beneficiosos, pero en este campo se requieren
muchos conocimientos y pasar muchos años
aprendiendo la ciencia que se esconde detrás de la
fragancia”. Y es que no es oro todo lo que reluce.
Mito:
Sólo tiene que ver con el aroma
“Mucha
gente piensa que es una terapia que sólo tiene que
ver con el aroma, pero es mucho más que eso. Por
ejemplo, muchos productos de aromaterapia tienen
ingredientes que poseen propiedades analgésicas.
En este caso, no es el aroma el que acaba con el
dolor, sino esas propiedades de la hierba”,
explica Bennis. Tina Rocca-Lundstrom, presidenta
de Aroma Naturals, considera fundamental definir
en primer lugar lo que es exactamente la
aromaterapia: el arte de usar aceites esenciales
específicos, extraídos de las diferentes partes de
las plantas (maderas, hierbas, hojas, flores...) y
que pueden ser usados para afrontar problemas
físicos o psíquicos.
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Mito 3: No
puede realmente ayudar a aliviar nuestras
molestias diarias
Actualmente, la aromaterapia sí que puede
convertirse en una práctica sencilla para ser
incorporada a la vida diaria. Por ejemplo,
puede convertirse en un arma muy útil para las
personas que tienen problemas de insomnio”.
Así existen multitud de productos que pueden
ayudar a solucionar este problema, mezclando
lavanda,
ylang ylang y cedro, por ejemplo. Todos estos
aceites esenciales tienen propiedades sedantes
y, cuando se combinan, se crea una mezcla aún
mas poderosa. El ylang ylang, por ejemplo, es
sedante, pero además, da a la mezcla un toque
de dulzura.
Mito 4: La gente está demasiado estresada como
para que funcione
Con el ritmo de vida actual, la aromaterapia puede
convertirse en una aliada imprescindible. Los
especialistas concluyen que sólo hacen falta unos
segundos para sentir sus beneficios. Ya lo
consideraba el propio Hipócrates, en el año 500
antes de Cristo. “Él decía que la manera de estar
saludable era tomar un baño aromático y un masaje
con aromas cada día. Si siguiéramos su consejo,
todos estaríamos un poco menos estresados”,
explica Bennis.
Mito 5: Es fácil encontrar productos puros
Hoy en día, en los estantes de las tiendas, son
muchos los productos que presumen de tener que ver
con la aromaterapia. “Se ha convertido en una
palabra de la que se abusa, como cuando hablamos
de producto natural”, apunta Rocca
Lundstrom. Así, son muchas las velas que no son
realmente productos de aromaterapia, pues no
contienen aceites esenciales, pese a que así se
anuncien. Es fundamental comprarlos en tiendas
específicas y herbolarios, y mirando siempre la
etiqueta del producto que está comprando, para que
no le den gato por liebre.
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Nota: Esta información proviene de
la página
www.hola.com
Gabriela Alvarado Y.
Distribuidora Just
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