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Dionaea muscipula : Venus Atrapamoscas / Otras Plantas Carnivoras
Índice de Otras Plantas Carnivoras :
(1) Drosea capensis
(2) Sarracenia purpurea
(3) Nepenthes khasiana
(4) Sarracenia 'catesbaei'
(5) Sarracenia psittacina
(6) Pinguicula 'Weser'
(7) Drosophyllum lusitanica
(8) Cephalotus follicularis
(9) Drosera aliciae
Otras Plantas Carnivoras:
Hasta ahora todo el contenido de esta Web estaba dedicado a la Dionaea muscipula.
Pero hay otras muchas plantas carnívoras interesantes.
Aquí iremos poniendo información de otras plantas de este tipo con el mismo criterio que en todas las secciones, es decir, las fotos serán tomadas específicamente para esta Web a partir de algún ejemplar de mi colección y los textos resumirán la información que vaya encontrando para facilitar el cultivo.
2. Drosera capensis
Viva
2005
La planta continúa bien. Este año ha tenido muchas más flores que el año pasado. Regalé algunas de las semillas que recolecté el año pasado y, según me han dicho, han germinado muy bien. Este año he vuelto a recolectar muchas semillas que, pro cierto, son minúsculas.
2004
Fotos tomadas entre los meses de septiembre y diciembre de 2004
1. Drosera capensis
La Drosera capensis, en inglés, recibe el nombre de "Cape Sundew", lo que podríamos traducir algo así como "Rocío del sol del Cabo". Este nombre común hace referencia a dos características importantes de esta planta carnívora: (1) su hábitat natural se encuentra en el El Cabo (Sudáfrica) y, (2) cuando recibe la luz de forma directa, parece estar cubierta por gotas de rocio sobre un fondo rojo. Pero no es rocío, ¡es pegamento!
Este intenso color rojo no sólo resulta atractivo para los humanos, también los insectos sienten un irrefrenable deseo de posarse sobre él: ¡grave error! Una vez que hagan contacto con el pegamento (mucílago) no podrán zafarse de él y quedarán definitivamente pegados, hasta que los jugos gástricos generados por la planta terminen por convertirles en sustancia digerible por la Drosera capensis.
La Drosera capensis puede llegar a ser una planta de un tamaño relativamente grande y, sin ninguna duda, de una gran belleza. Además se trata de una de las plantas carnívoras mas sencillas de cultivar, ya que se adapta muy bien a diversas condiciones climatológicas, por todo eso se ha convertido en una las especies favoritas de buena parte de los coleccionistas de plantas carnívoras.
La Drosera capensis crece bien en lugares donde las temperatura oscile entre 5ºC y 25ºC, pero puede tolerar perfectamente tanto heladas (no demasiado prolongadas) como temperaturas que sobrepasen puntualmente los 35ºC. Además es una planta perenne que no necesita pasar por un periodo de hibernación, por lo que se puede disfrutar de ella a lo largo de todo el año.
Incluso en el caso de que las heladas sean lo suficientemente fuertes y prolongadas como para que la planta parezca morir, sólo es cuestión de tener un poco de paciencia ya que, en el momento en que las condiciones mejoren la Drosera capensis rebrotará.
Desde la primavera hasta el otoño la Drosera capensis florece, para lo que produce largos tallos florales, cada uno de los cuales puede tener entre una y dos docenas de flores. La vida de cada flor es efímera, pero, dado que las flores van abriéndose día a día, cada tallo puede permanecer con flores durante cerca de un par de semanas.
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Las flores son de pequeño tamaño, no sobrepasando nunca los 2 cm. de diámetro, y producen una abundante cantidad de semillas. Uno de los motivos por los que se trata de una planta sencilla de reproducir a partir de semillas consiste en que la Drosera capensis es autopolinizable, es decir, un insecto que recoja polen de una flor puede terminar polinizando a esa misma flor. El segundo motivo que facilita la consecución de nuevas plantas es que las semillas germinan fácilmente sin mas que sembrarlas en un sustrato a base de turba húmeda.
Para recolectar las semillas hay que esperar a que se seque el tallo floral y, cuando la cápsula con la semillas esté en el momento oportuno, deben ser recogidas con mucho cuidado para evitar perderlas.
Para facilitar el proceso de polinización, la Drosera capenesis produce unos tallos florales mucho mas largos que el resto de sus hojas-trampa. Su intención no puede ser más práctica: hay que evitar a toda costa que el insecto que las poliniza se quede pegado en una de las hojas, ¡al menos antes de terminar el proceso de polinización!
Por supuesto que no es necesario esperar a que la polinización se realice de forma natural. Para asegurar una correcta polinización siempre cabe la posibilidad de utilizar un pequeño bastón con algodón en sus puntas, de forma que, convenientemente manipulado, realice la misma labor que realizarían los insectos de forma natural.
Como sustrato de cultivo puede emplearse una mezcla similar a utilizada para cultivar Dionaea muscipula, es decir, turba rubia a base de esfagnos (60%) y perlita o arena (40%).
La Drosera capensis tiende a producir unas largas raíces que están continuamente absorbiendo agua, por lo tanto se debe regar abundante, sin dejar que la tierra se seque nunca. Sólo en los meses de invierno puede reducirse ligeramente el ritmo de regado. En cuanto a la forma de regar, puede emplearse perfectamente el método de la bandeja, aunque tampoco resultará perjudicial regarla por arriba.
En cuanto al tipo de agua, ¡lo habitual!: es deseable utilizar agua desmineralizada, así que no se debe utilizar directamente el agua del grifo. Además de utilizar abundante agua desmineralizada, la Drosera capensis necesita mucha luz, ¡cuanta mas mejor! En caso de que la planta no reciba suficiente, sus hojas decaerán y no producirán pegamento (muscílago).
En cuanto al procedimiento empleado por la Drosera capensis para cazar a los insectos, cabe destacar que no es exclusivamente pasivo, es decir, cuando el insecto queda adherido al mucílago, la hoja comienza un lento, pero continuo, movimiento destinado a "abrazar" a la victima para facilitar el proceso digestivo.
