Impunidad
«La gente se ve despojada de sus ropas,
apareciendo como irreconocibles humanoides luminosos. Desdibujados sobre sus cuerpos
cuelgan como por arte de magia bolígrafos, monedas y llaves. Los coches se tornan oscuros
y siniestros, aunque la parte caliente del radiador brilla con intensidad.
Únicamente las partes reforzadas de la estructura de acero quedan a la vista; de este
modo, los edificios se asemejan más a jaulas hechas a base de tuberías de cobre y cables
de electricidad que a viviendas u oficinas. No existe mucha intimidad en el mundo revelado
por la cámara de onda milimétrica. Salas de estar, dormitorios y
cuartos de baño se funden en un único espacio descubierto. Los súbditos aparecen
sentados en el interior de sus jaulas contemplando cajas luminosas o durmiendo suspendidos
a escasos centímetros del suelo.»
Este extracto de un artículo publicado en la revista New Scientist - suplemento del 5 de
noviembre de 1995, ed. británica - describe las posibilidades de la cámara milimétrica,
disponible ya a nivel civil y fabricada por la compañía estadounidense Millitech. Por
otra parte, el Lawrence Livermore National Laboratory de California ha desarrollado un
radar de imagen de bolsillo, económico de ensamblar.
Alan Yu es un ex - alto mando de la seguridad nacional de Taiwán, hoy refugiado político
en los EE.UU. La arriba mencionada información sobre tecnología milimétrica a nivel
civil apareció en uno de sus artículos acerca del estado policíaco que subyace en los
llamados «países libres». Puedo atestiguar, y atestiguo que los métodos policiales
por él aquí descritos son rigurosamente ciertos.
«Dado que el sistema (máquina) para el control de la mente y manipulación de la vida de
las personas no contribuye de manera efectiva a proteger nuestra seguridad nacional (no es
capaz de localizar a los espías de naciones extranjeras), [...] ha terminado por
convertirse en el dispositivo de control interno (de la población) --ver artículos
anteriores para más detalles. Este sistema de control está siendo actualmente utilizado
contra nuestros conciudadanos.
Ante semejante situación, es nuestro deber conocer las funciones concretas de dicho
sistema, amén de los motivos que propician su uso en contra de nuestros conciudadanos. Si
son respetuosos con las leyes, si no son criminales, ¿por qué han de ser controlados y
monitorizados por los agentes de las fuerzas de la seguridad del estado? [...]
Ya en 1970, Zbigniev Brzezinski - conocido como el último consejero para la seguridad
nacional del presidente Jimmy Carter- predijo que "una sociedad cada vez más
controlada y dirigida iría apareciendo de modo gradual y paralelamente al avance de la
tecnología. Esta sociedad acabaría siendo totalmente subyugada por una elite poseedora
de un supuesto conocimiento científico superior."
Una vez desembarazados de las restricciones impuestas por los derechos y libertades
civiles, esta elite procedería a culminar sus objetivos políticos mediante técnicas de
modificación de la conducta y de control integral gracias a sus avanzados sistemas de
vigilancia." - Estas palabras demuestran los importantes avances realizados con
respecto al desarrollo de máquinas para el control de la mente humana y otras
tecnologías afines durante la década de los 60.- "En dicho momento, pues, los
avances tecnológicos y científicos conformarían la situación previamente
planificada", concluye Brzezinski (ver Angels Don't Play This HAARP, p.200).
En agosto del año 1971 surge un plan denominado Sistema de Seguridad para una Vigilancia
Eficiente, presentado al presidente Nixon para evaluación. Consistía básicamente en un
sistema de vigilancia que incluía todos los hogares, automóviles y barcos de los E.U.A.
por medio de una red de televisión que comprendía, además, un dispositivo de propaganda
gubernamental con cobertura para todos los estados, ciudades y hogares de los Estados
Unidos (ver Uncloaking the CIA, p181).
Aunque dicho programa contó con la aprobación de Nixon, finalmente fue revocado debido a
las objeciones presentadas por el fiscal general de los EE.UU. Estos hechos demuestran,
por una parte, que tenían planeado vigilar la nación por entero, y por otra, que debían
de disponer de semejante tecnología desde hacía tiempo. Este programa pone de
manifiesto que los agentes de las fuerzas del orden poseen la tecnología de ondas de baja
frecuencia - no podrían llevar a la práctica sus objetivos de otro modo sin ser
descubiertos - para vigilar vuestra casa, vuestro coche, embarcación, etc. a través de
una red de comunicaciones que debía incluir cada estado, ciudad y hogar desde 1971.
En 1980, el Senado de los EE.UU. dio el visto bueno a la Ley para Descubiertos de la
Inteligencia. Esta ley incluye el no establecimiento de normas reguladoras para las
operaciones encubiertas, o relacionadas con el reclutamiento de académicos, sacerdotes y
periodistas como espías o informadores, así como el no establecimiento de sanciones por
descubrir públicamente a agentes contratados por los EE.UU. (ver CIA, por Brian
Freemantle, p.73).
Estos datos demuestran, a su vez, que las agencias de inteligencia quedaban autorizadas
para desplegar el sistema de vigilancia integral si los agentes de la seguridad eran
capaces de conducirlo en secreto. - Se da la "coincidencia" de que el sistema
GWEN de telecomunicaciones comenzó a ser desplegado en 1980. Las torres de este sistema
tienen capacidad para emitir ondas de baja frecuencia con la finalidad de mantener activos
los dispositivos de vigilancia. Cada conjunto de antenas puede cubrir un radio de 250-300
millas o entre 62.500 y 90.000 millas cuadradas.
Este tipo de dispositivos debería ser utilizado para combatir y restringir acciones
ilegales o criminales.
Si los oficiales encargados del sistema se dedican a contravenir los derechos
contenidos en la Constitución, la clase de control ejercido no difiere del de un régimen
totalitario.
Dado que la máquina para el control de la mente se ha venido utilizando casi
exclusivamente contra los ciudadanos honrados, estos agentes han acabado por convertirse
en los controladores del Pueblo en lugar de servidores públicos.
[...] Si el cometido primordial de los agentes consiste en controlar a la ciudadanía,
ello demuestra que no tienen especial interés en reducir la tasa de crímenes. Esto
explica que el índice de criminalidad nunca haya experimentado una reducción notable en
este país.
Los agentes encargados de estos dispositivos utilizan tecnologías científicas
avanzadas para tener acceso al pensamiento humano, y aplican métodos de la sicología
para crear situaciones estresantes de presión con la finalidad de alterar la conducta del
objetivo. Peor aún, usan este tipo de arsenal electromagnético con el propósito de
manipular la vida y la salud de estas personas.
En suma; por medio de este sistema de vigilancia y control de la mente, estos agentes
encubiertos tienen la potestad para espiar en la intimidad de nuestra gente y manipular
sus vidas con la intención de controlarlas totalmente. [...] Después de tantos años
utilizando estos métodos en este país, dichos supuestos servidores públicos (agentes de
policía) han terminado por convertirse en los controladores de la población en general.
Efectivamente, estos oficiales y agentes encubiertos creen realmente ser los amos de la
sociedad. Creen - no sin motivo - que su potestad para manipular y decidir sobre la vida
de las personas ha quedado legitimada por el gobierno.
De ahí que sus víctimas suelan ser ignoradas por el grueso de la sociedad o acusadas
por la policía de padecer trastornos mentales cuando denuncian su situación en los
juzgados (ver el informe Microwave Harassment & Mind Control Experimentation de
Julianne McKinney).
"Una mujer, conducida a situaciones de tensión extrema por medio de agresiones
electromagnéticas concentradas en la persona de su hija de corta edad, optó por acabar
con la vida de la pequeña en un intento de evitar su continuo sufrimiento.
Otra mujer, durante el transcurso de una conversación telefónica, fue amenazada por un
funcionario de la compañía local de electricidad aludiendo a la vida de sus hijos en
caso de seguir oponiendo resistencia a la instalación de torres de alto voltaje junto a
su vivienda. A partir de entonces, su hija de 11 años ha sido sometida a un sufrimiento
extremo, y hospitalizada para ser tratada de una 'enfermedad' imposible de diagnosticar.
Por otro lado, todo parece indicar que el hijo de tres años de esta mujer se halla
recibiendo frecuencias electromagnéticas focalizadas en el conducto auditivo."
Llegados aquí, querría remarcar un hecho importante para aquellos lectores que puedan
pensar que los ejemplos anteriores son casos aislados, y que semejantes situaciones no se
pueden llegar a dar en medio de la población.
Las dos familias citadas en el ejemplo están compuestas por ciudadanos honrados de clase
media, viviendo en su domicilio particular. Pese a esto, los miembros de estas familias
son impunemente espiados, y sus hijos no pueden evitar ser agredidos por medio de ondas
invisibles electromagnéticas.
Algunas víctimas pertenecientes al sexo femenino han denunciado ataques en la región
urétrica estando en sus casas. Tras leer los casos anteriores, cabe deducir que dicen la
verdad; de manera que estos sujetos pueden atacar a sus víctimas en puntos de acupuntura
con gran precisión. Así, se suelen dar casos en que por medio de una pistola de tipo
cronal se manipulan las funciones del organismo humano, provocando el que la víctima se
orine en la cama o experimente eyaculaciones nocturnas por medio de sueños eróticos
inducidos artificialmente para evaluaciones biofísicas de rutina.
Estos hechos demuestran que los oficiales corruptos de las fuerzas de la seguridad poseen
el no va más en cuanto a tecnologías reservadas. [...]
Los agentes jóvenes seleccionados para desempeñar estas criminales tareas serán
entrenados por los agentes encubiertos más veteranos. Este tipo de entrenamiento
utilizará la vida de determinadas personas a modo de experimentación. Esta es la
parte más importante de su formación, y el agente encubierto asesinará con toda
probabilidad a su víctima si ésta llega a percatarse del operativo de vigilancia o de la
presencia del agente, con el objetivo de evitar filtraciones acerca de sus actividades.
Una vez concluido el período de entrenamiento, los agentes encubiertos pueden no sólo
manipular la vida de las personas (su salud y actividades), sino también acabar con sus
víctimas, pues su condición es la de un asesino profesional. Por todo esto, el sistema
de vigilancia y control de la mente ha venido utilizándose durante largo tiempo en
nuestra sociedad, y aun así, puede permanecer oculto como el principal secreto de estado.
Efectivamente, estos sicarios oficiales pueden causar graves enfermedades - cáncer,
por ejemplo - a sus víctimas, siempre de un modo lento para evitar sospechas. Igualmente
pueden matar a un objetivo de manera inmediata en casos concretos --accidente de
circulación, irradiando un haz de microondas desde la columna de dirección haciendo que
el conductor caiga profundamente dormido, infarto de corazón o derrame cerebral por medio
de un generador de infrasonidos , etc.
En definitiva, la rutina de estos agentes encubiertos consiste en manipular la vida de
aquellas personas que conocen sus métodos, infringen sus intereses o, simplemente, les
resultan incómodos --incluidos sus oponentes y víctimas de experimentación. Y si
estos oficiales y agentes encubiertos pierden el control sobre su víctima, cooperarán
estrechamente con la finalidad de enajenar sus facultades mentales o acabar con su vida
discretamente. Estas víctimas, pues, serán agredidas por los sicarios encubiertos
hasta perder la razón o fenecer, pues éstos no se pueden permitir que sus crímenes y
actividades inhumanas salgan a la luz.
Si alguien ha sido acusado - directa o indirectamente - como enfermo mental por parte
de los oficiales, estos mismos oficiales serán los encargados de martirizar sin resquicio
a esa persona. De ahí que estas víctimas sean tratadas como auténticos desequilibrados
por los demás --incluidos sus propios familiares.
También se dan casos en que estos criminales reciben el encargo de acabar en secreto con
su ex-colaborador en casos en los que peligre el sistema de control y vigilancia integral.
Por ejemplo; en 1995 un ex-alto cargo del Instituto para la Seguridad Nacional de Taiwán
falleció de un "ataque al corazón" en una piscina pública de Taipei. Este
suceso ocurrió 48 horas después de que anunciase su intención de escribir sus memorias.
La viuda afirmó que su marido nunca había padecido problemas cardíacos - sustentado por
su historial médico -, y reclamó la práctica de una autopsia para determinar las
causas de su muerte.
Nosotros pensamos firmemente que fue asesinado por los agentes encubiertos para evitar
cualquier filtración acerca del sistema de control integral instituido en su día por
parte de la agencia de la seguridad nacional.
Este sistema para la vigilancia y el control de la mente humana es el dispositivo para
la seguridad nacional de Taiwán desde finales de la década de los 70, y ha de ser igual
en los EE.UU. y la mayoría de los "países libres". En Taiwán, la máquina
para el control de la mente se conoce - en lengua inglesa - como Máquina del Lenguaje
Sicólogo; en mandarín su nombre se pronuncia Sin-Li-Yue-Yan-Gui y la traducción literal
sería "la máquina que lee el pensamiento humano".
Acusar a otros de ser enfermos mentales sin pruebas sólidas constituye la marca y señal
de las organizaciones criminales involucradas en el control encubierto de la mente humana.
Si un agente de la policía declara directa o indirectamente a una persona como
"enfermo/a mental" y el departamento de la seguridad social no incluye a dicha
persona en el programa de asistencia a minusválidos e incapacitados, ello representa una
especie de aniquilación política o falsa acusación para desacreditar. Esto es así
porque el cuerpo superior de policía es la unidad básica para el control de la mente
humana.
Cuanto más breve la mentira, mejor. De este modo, los mentirosos evitan en lo posible
incongruencias y errores que otros pueden detectar.
Incluso en las batallas más terribles hay soldados que sobreviven. Sólo la verdad
acabará por aplastar la vileza, triunfando por la eternidad.
Alan Yu
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- Aquello que proporciona información veraz a los súbditos constituye una
amenaza para las estructuras del poder establecido.-
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