EDOUARD MANET

Retrato de Berthe Morisot, 1869

Óleo sobre lienzo, 74 x 60 cm.

The Cleveland Museum of Art

 

Fue el pintor Henri Fantin-Latour quien en 1868 presentó a Berthe Morisot a Manet, mientras ella copiaba un cuadro de Rubens en el Louvre. Atraído por "su respetada inteligencia, su instinto salvaje y su pelo castaño alborotado", Manet pidió inmediatamente a la joven que posara para el que sería su célebre cuadro "El bacón (Musée d'Orsay, Paris). La obra iniciaría una larga serie de sesiones de pose en las que Manet ejercitaría su talento para pintar a alguien que no sólo iba a ser una fuernte de insipiración sino, más importante, una colega y, más tarde, cuñada (pues Berthe contrajo matrimonio con Eugène, el hermano pequeño de Manet, en 1874). Manet llegó a pintar más de diez retratos de Berthe, cinco de los cuales, incluido el que nos ocupa, permanecieron en poder del pintor hasta su muerte. Muestra de la familiaridad que se estableció entre ambos artistas es la certa que Berthe escribió a su herrmana Edma a la muerte de Manet en 1883: "Nunca olvidaré nuestros días de amistad e intimidad cuando posaba para él y cuando el hechizo de us mente me mantenía despierta durante esas largas horas".