-¡Hey, Damion! Llevas un mes observando a Christie. Ésta buena, cáele.
-P-p-pues no se, Harry.
-Ya no seas payaso, sé que en el fondo tienes un poco de valor.
-N-no s-se, Harry.
-¡Ja! Perdedor, estaba bromeando.
Damion baja la cabeza como un perrito manso, como lo ha hecho toda su “vida de mierda”, como él la llama, pero hoy, por lo menos hoy, el piensa que la vida le debe un poco de felicidad.

Son las 4:30 de la tarde y Damion no se ha orinado en sus pantalones, ése es un buen comienzo, ahora lo que debe hacer es buscar a Christie, ella será su pequeña porción de felicidad después de mucho tiempo, el piensa.

“Oh, Dios, Christie es tan bella”, dice Damion en voz baja a observarla parada con sus amigas con sus libretas presionadas en sus hermosos y grandes pechos, con ropa infantil la cuál no le quita la apariencia de joven mujer en su plenitud, ni siquiera con las dos coletas con cabello corto que el día de hoy se hizo.

-Hola Christie.
-Oh, hola... perdón, ¿Quién eres tú?
Damion responde mientras intenta evitar que las chicas se den cuenta de que sus piernas está temblando aún mas que sus dientes- ¿No me recuerdas? Estuvimos juntos en el foro de la drogadicción, es mas, hasta platicamos un rato.
-Ah, eres ése, ¿Qué quieres?
Hay frialdad en el aire, Christie no podía ser mas directa, porque aunque es una chica muy inteligente, es muy superficial.
-Sí, soy yo –Responde Damion con cierto desaire- S-s-sólo quería invitarte a salir ésta t-t-t-tarde...
-Calma, no tartamudees –Las amigas de Christie ríen intentando no ser muy obvias-.
-Bueno, v-veo que no quieres, me voy.
-Oye no es nada personal, es que tu amigo Harry... ¿Es tu amigo? Bueno, Harry me invitó a salir primero y ya acepté su invitación.
-Maldito bastardo –Dice Damion con voz baja-.
-¿Perdón?
-No, nada. Adiós.
-Adiós... Perdedor.

Mientras Damion se retira apretando los puños, una sombra se esconde atrás de un árbol observando, planeando, con una de sus cualidades mas sobresalientes: la paciencia. El nombre de ésta sombra es Robert Natchios, y Robert ha decidido seguir a una joven pareja de personas populares llamados Harry y Christie, quienes se ríen de los pocos, casi nulos, dotes sociales de Damion, y decidiendo qué es lo que van a hacer. Robert está lo suficientemente cubierto para que su aspecto no se note, pero demasiado para un día caluroso como ése, algo extraño en Gotham City, por lo cual no pasa desapercibido, pero nadie lo toma en cuenta con tantas cosas en la cabeza y con la prisa de llegar a sus casas antes de que oscurezca, puesto que no es conveniente pasear de noche en Gotham City.

Robert siempre ha tenido muy buen oído y por fortuna para él, la descuidada pareja no se ha dado cuenta de su presencia, así que él entra al cine junto a ellos y se sienta a su lado, por lo que escucha los planes para la tarde y la noche, ya que es viernes y no hay adolescente que no se divierta en viernes, a excepción de gente como Damion, quien se aplastará en la computadora y escuchará a Slpiknot maldiciendo a la vida por el resto de la noche. El plan para la tarde es permanecer juntos en la casa de Harry y tal vez tener sexo, puesto que los padres de Harry no estarán en su lujosa casa todo el fin de semana, y el plan para la noche es ir a bailar y divertirse, tal vez intercambiando pareja. Robert ha descubierto otra cruel verdad que lo hace detestar aún mas a la gente de Gotham City: Christie y Harry son novios desde el día de hoy, y decidieron burlarse un poco de Damion, así que Robert piensa: “No irán a bailar, creo que la relación tendrá un poco de calor”.

Damion también está sólo en su casa, y mientras está haciendo un acto de consolación, algo muy común en él, puesto que nunca ha tenido novia, suena el timbre. Son las 7:00 de la noche. Cuando Damion abre la puerta no ve nada mas que un sobre sin remitente, el cuál decide abrir inmediatamente. Lo que contiene el sobre es una carta escrita con muy mala letra, pero entendible para un adolescente, que dice: “Harry y Christie se han burlado de ti todo el tiempo, son novios, están en la casa de Harry, si quieres venganza, yo te la puedo proporcionar, será placentero, ven a la casa de Harry”. Para Damion el mensaje era muy tentador, así que decidió ir sin dudarlo ni siquiera un momento, porque aunque el creía que era una broma, algo extraño había en ése mensaje.

Son las 7:15 de la noche y Damion está parado frente a la casa de Harry, ha esperado por cinco minutos y nadie aparece, así que mientras decide si retirarse o no, un extraño hombre muy bien cubierto, sobre todo del rostro, que con su sola presencia provoca temor, se para enfrente de él, voltea a ambos lados, y al ver que no hay nadie, le corta la garganta y lo esconde entre los arbustos.

Son las 7:30 de la noche y Harry y Christie acaban de tener un placentero sexo, y parece que Christie quiere seguir con él, pero Harry está muy cansado. En ése momento las luces se apagan y el radio deja de sonar, no hay energía eléctrica. Eso espanta a Harry y Christie le dice que es un gallina, así que lo convence de que bajen juntos a revisar qué sucedió con la energía eléctrica para qué el “no se asuste solito”. Harry se sonroja, pero él siempre le ha temido a la oscuridad, además de que su casa es enorme y en verdad la idea le parece buena, así que acepta. Al bajar las largas escaleras, Christie se pincha un dedo del pie derecho con algo y le dice a Harry que siga él sólo. Robert sonríe. Harry llega y observa que un cable fue cortado, así que la adrenalina sube en su cerebro y corre descuidadamente a buscar a Christie gritando su nombre con desesperación. Christie no responde. Harry se asusta aún mas, y que eso no es gracioso. Nadie responde. Harry tiene un terrible presentimiento. Harry comienza a llorar de temor y dice mamá en voz baja, luego comienza a rezar, pero el rezo de Harry no pudo ser concluido puesto que Harry se desmayó gracias a un líquido adormecedor que alguien le puso en la nariz con un poco de algodón. Cuando Harry despierta ve a su novia amarrada llorando porque parte de sus entrañas están fuera de su cuerpo y ella sigue viva, agonizando, pero viva. Robert recuerda que su madre murió porque los caníbales se comieron sus entrañas. Harry vomita en su ropa y comienza a rezar, pidiendo que todo eso sea un sueño. Cuando Harry voltea a la izquierda observa el cuerpo de Damion colgado con las manos atravesadas en la lámpara, con el cuello cortado y con un papel en su pecho con la frase: “¿Porqué me hicieron esto?”, y vuelve a vomitar.

“Pobre chico –Aparece en un papel pegado a la pared que Harry lee en voz alta y llorando- Yo no quería matarlo, el sufrió mucho, y aún mas gracias a ustedes, escoria, ¡Por gente como ustedes me vengaré de toda Gotham City! Maté al pobre Damion sólo para hacerlos sufrir un poco mas a ustedes dos, él, en éste caso, fue sólo un medio para el fin, pero por lo menos el murió rápido y casi sin sufrir, porque, por lo que yo observé, el no le hizo daño a nadie, pero ustedes... Ustedes, basura, morirán lentamente. Por porquería como ustedes me vengaré de Gotham City completa, porque ustedes no mataron al pobre chico físicamente, pero sí lo hirieron severamente psicológica y sentimentalmente de una manera muy cruel, pero el problema es que ahora no podrán enmendar su error porque seguramente ya hicieron lo mismo no sólo con Damion, sino con otras personas vulnerables... Desgraciados”.

Harry pide piedad mientras Robert sale de las sombras descubierto, aterrorizando a Harry con su aspecto, pero Christie ya casi no está consciente. Robert va directo al grano y le hecha gasolina a Harry y a Christie con una terrible sonrisa dibujada en su horrible rostro. Luego se pone las ropas que le cubren las cicatrices del cuerpo y un poco las de su cara y hecha un cerillo sobre Harry y otro sobre Christie. Lo mismo hace con el resto de la casa y sale por la puerta trasera con mucho cuidado escondiéndose en un terreno abandonado que se encontraba junto a la casa de Harry.

Cuando la casa se incendia completamente y Robert lo disfruta como ninguna otra cosa en éste mundo, se mezcla entre los vecinos que se acercan a ella y, cuidadosamente, se retira.

La policía y BATMAN llegan. El crimen fue totalmente limpio y todas las pruebas fueron destruidas por el fuego. Gordon se aleja de la multitud y se encuentra con BATMAN en un rincón oscuro. Ambos se han informado acerca del reciente violento escape de Robert Natchios de Arkham, y saben que él es un sociópata pirómano, así que ambos ya tienen una idea de por dónde empezar a investigar. Por lo mientras no hay mucho de qué hablar.

Jim regresa a la escena del crimen, fuma un cigarrillo y toma café para amarrar su estómago y quitarse el hambre de las próximas cuatro horas. BATMAN permanece en las sombras.

Continuara...