- Diario Expreso (Perú)
- Sábado 10 de marzo de 2001
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Soledad: "No soy una excelente cantante"
- En rápida visita a Lima, donde participó en
el homenaje a nuestra compositora Chabuca Granda, la cantante argentina Soledad se dio
tiempo para conversar con EXPRESO, del vals (incluye tres en su reciente grabación), de
sus proyectos y dejó abierta la posibilidad de regresar a medio año acompañada de su
banda.
- -¿Qué conocimiento tienes de la obra de Chabuca
Granda?
-Bueno, el mayor conocimiento que tengo es el último disco, que creo lo grabó en
Argentina. Me sorprendió mucho porque conocía a Chabuca de nombre, pero nunca había
interiorizado su música. Sabía que era la de La flor de la canela y Fina estampa, pero
cuando escucho el disco que te menciono, donde hay canciones como Toro Mata y José
Antonio, por ejemplo, realmente me sorprendo...
-¿Por qué?
-No sólo por el ritmo sino por la fuerza de los instrumentos a pesar de no haber una gran
variedad. Es un disco que llama a escucharlo.
-¿Escuchaste de chiquita estos temas?
-La flor de la canela?, por supuesto. Las cantábamos en la escuela primaria con la
profesora de música. Fina estampa también era conocida, pero la aprecié más en el
disco de Caetano Veloso
-¿Más allá del afecto sientes alguna relación en lo musical con lo que tú
haces?
-Si, sobre todo a partir de José Antonio, que acabo de grabarlo. Cuando lo escuchaba
admiraba la fuerza de los cajones, el toque de la guitarra. Además, hay que tener
personalidad para poder cantarlo. Para mí era un desafío cantar el tema después de
haberlo escuchado por Chabuca. Ella lo hizo con un fraseo muy especial.
-Ella fue muy criticada cuando empezó a cantar...
-Creo que tiene más mérito que el mismo autor muestre sus canciones porque es la mejor
forma de hacerle entender al público qué es lo que quiere decir. A mí me pareció una
persona muy afinada. Yo no soy tampoco una excelente cantante.
-¡Por favor!
-No, si vos mirás los críticos de Argentina recién ahora dicen: Soledad mejoró. Pero a
mí me han dado con un caño siempre por mi forma de cantar. Porque yo no nací cantante.
Nací intérprete o artista y creo que hay una gran diferencia. El cantante se hace porque
la posibilidad de estudiar la tiene todo el mundo.
-¿Te estás haciendo cantante?
-Exactamente...Chabuca tenía ese no sé qué de poder comunicarse a través del canto, de
decir cosas. El sentimiento es fundamental. La técnica puede ser adquirida, pero el
sentimiento no.
-Tu anterior disco Yo sí quiero a mi país, no convenció en el tratamiento
musical, Emilio Estefan un poco que te sacó de lo que te había caracterizado, de la cosa
telúrica, seguramente que por la pretensión internacional. ¿Qué evaluación haces de
ese disco?
-Creo que fue el momento de mi carrera en que más crecí, yo respeto mucho ese disco más
allá de los errores. Fue para mí un momento muy especial en mi carrera. De hecho, la
actual banda que tengo es gracias a ese disco y ahora hemos hecho una producción más de
tierradentro, más local.
-¿No te sacó Estefan de tu esencia?
-No. Me enseñó que también puedo hacer otras cosas, que no siempre tengo por qué hacer
folclor, que puedo darme libertades. Con Estefan claro que hubo códigos que no
funcionaron, pero fue una experiencia que me sirvió. Yo siempre digo que si sacaba en
Argentina otro disco folclórico no había ninguna novedad. Actualmente, los artistas
tenemos que crear expectativa. El resultado puede ser diverso, pero creo que vale la pena
ir probando, no?
-El camino natural de la gente que se acerca a Estefan es grabar unos cuantos
disco y después irse por el pop o el inglés y algunos especularon que contigo iba a
pasar lo mismo...
-No...nunca estuvo eso en las perspectivas. Nosotros quisimos aprovechar el momento porque
pertenecemos a una compañía discográfica internacional que, lamentablemente y por
órdenes de la oficina central, da preferencia a los artistas que ya son internacionales y
tienen una chapa. Para los que hacemos música local es muy difícil recibir cierto apoyo.
Acceder a un disco con Estefan era importante para que mi compañía supiera que tenía
otra artista que defender. Lamentablemente y como ocurrió con los anteriores discos, no
hubo tal defensa del artista y, bueno, seguiremos intentándolo. Esa es nuestra búsqueda,
la de un camino que nos ayude a salir al exterior.
-¿El nuevo disco está planteado como un retorno?
-No, porque mientras salió Yo sí quiero a mi país, mis shows no dejaban de lado mis
discos anteriores. No soy de esos artistas que dicen: bueno, esa grabación ya fue de una
época de mi vida y no lo hago más. No. Yo trato de elegir un par de temas de cada disco
y armar el show. O sea que siempre fue un show folclórico con un bloque de lo nuevo. Hoy,
Yo sí quiero a mi país está tan metido en la banda que no se da cuenta cuándo es un
disco y cuándo otro. Pero el último es más personal, más intimista. Es un capricho
mío más que para vender. Ya estoy trabajando en otra producción internacional que
todavía no tiene dirección, pero para lograrlo era necesario sacar éste primero.
-¿Tu nueva grabación no será de folclor?
-Traerá a lo mejor canciones más estilizadas y de trova, conocidas. Me voy a tomar el
atrevimiento de hacer mis propias versiones.
-Una observación, en la ficha de tu disco aparecen equivocados los nombres de
varios compositores, como el de José Antonio, que pertenece exclusivamente a Chabuca
Granda...
-Son errores de la editorial porque cada vez que se hace un disco se lleva a corroborar a
SADAIC... Con el tema de Chabuca lo que ocurrió es que en un disco suyo aparecido en
Argentina figura su nombre junto al de otra persona. Siempre he cantado vals peruano.
Propiedad privada tiene un ritmo que encaja con mi forma de ser, es un ritmo que me es
fácil hacerlo, me gusta...lo que hacemos siempre a todos los temas es acelerarlos. Es que
cuando subimos al escenario no sabemos frenar ese caballo de adrenalina que nos aborda.
-Sabías que Propiedad privada es argentino?
-Sí, lo que pasa es que tiene un ritmo asociado con los valses peruanos.
-¿A qué se debe que hayas grabado Sí queremos?
-Es un tema chileno. Sucede que hace bastante tiempo mi país está viviendo una época
muy fea a nivel social, de falta de esperanza, de mucho individualismo. La canción
siempre ha sido un motivo lindo para alegrar y compadecer. Por eso la escogí. (Agustín
Pérez Aldave)