Soledad marcó el pulso del fervor popular en Villa María
Más allá de la atención que pudo concentrar la
presencia de la chilena Cecilia Bolocco, en la noche del sábado del Festival de Peñas
fue otra la mujer que marcó el pulso del fervor popular: Soledad.
La muchacha de Arequito refrescó otra vez su capacidad para desatar una fiesta
incontenible. Con un anfiteatro colmado como nunca, el fervor alcanzó picos desbordantes.
Y ella, con su misteriosa clave para llegar al alma popular, sacudió la medianoche de
Villa María.
Era una noche con muchos aromas femeninos, y el primer sabor lo trajo Julia Zenko, para
abrir el festival antes de los fuegos artificiales. Después, subieron los interminables
Opus Cuatro, cuya calidad vocal tiene ganado un espacio sobresaliente en la historia de
este tipo de grupos.
Y entonces, otra mujer, Marcela Morello presentada por Cecilia Bolocco y Rony Vargas,
tuvo su oportunidad de conmover. La cantante, cuya voz se escucha desde hace unos años
con un hit tras otro, entusiasmo a la multitud que aplaudió y bailó sus temas más
conocidos.
La atracción de Jairo
Antes de la llegada del huracán de Arequito, hubo un momento para serenarse y escuchar
con atención. Es que el cruzdelejeño Jairo reclama eso de la gente, y la gente le
responde, como había ocurrido en sus presentaciones en Jesús María y Alta Gracia.
Jairo se tomó su tiempo sobre el escenario para plasmar un espectáculo con el sello
inconfundible de su personalidad. Y después sí, sobrevino el gran sacudón: Soledad
esta noche estará en Villa Allende puso al anfiteatro de pie y el ánimo del
público quedó sometido a su voluntad.