ESTELAS DEL PEREGRINO HUELLAS DEJADAS EN EL VIENTO POR LOS PEREGRINOS QUE LLEGARON HASTA EL FIN DEL MUNDO   RECOGIDAS EN  LOS AIRES DE LOS BOSQUES, DE LOS ACANTILADOS Y DE LAS PLAYAS BRAVAS, JUSTO TRAS EL RECICLAJE MENTAL DE LA CAMINADA, AL ATARDECER DEL ÚLTIMO DÍA.

Cuadros y textos del pintor   MANUEL COSTAS CASTELIN, que representan  el recorrido virtual del sendero del aprendizaje profundo del Hombre, en su peregrinar a través de las etapas del LABERINTO DE LA VIDA, desde sus bases esenciales     hasta la Maestría de Sí Mismo.    ELIGE UNA ESTELA Galego   volver al INDICE

En su navegar por la vida en busca de la propia realización, un poeta va dejando estelas de versos tras de sí.

Las etapas del peregrinar vital de un pintor quedan marcadas por estelas coloridas labradas a golpe de pincel sobre los antes inexplorados campos de tela de sus lienzos.

Lienzos, estelas, campos,

campos, telas, estelas,

compostelas.

Yo no aprecio diferencias importantes entre pensamiento, sentimento, poesía, pintura y filosofía de vida; todo eso me parecen los reflejos y rastros que va dejando mi experiencia de vida en el momento mismo de vivirla.

Como estelas de un navío o de un cometa,  las percepciones inmediatas de lo vivido permanecen  visibles algunos momentos más que la vivencia objetiva, sobre el espaciotiempo de la realidad subjetiva, conformando el plano de la reflexión y del aprendizaje.

Hay innúmeras formas de Arte, tantas como individuos creadores. A mí, la obra de arte que más me interesa, es la expresión espontánea y personal de un momento particular de consciencia intensificada, la huella de un pedacito de Vida vivida a plena atención y digerida con reflexión.

El resto de sus elementos me parecen sólo sus vestiduras materiales, técnicas o conceptuales, que pueden asumir múltiples formas, según el momento y según los materiales expresivos que el artista tiene a mano en el momento.

Son sólo la concha bajo la que se esconde la perla de la incomunicable experiencia vital subjetiva de un instante de aproximación a la Integralidad Vivencial.

(Negra Sombra que me asombras)

El estilo formal es fluctuante y cambiante, según la evolución personal del artista, como la larga vida de Picasso nos mostró. La verdadera obra de arte que realiza un hombre es la obra de su vida, de la cual sus expresiones artísticas son sólo reflejos, huellas, estelas.

Somos los creadores de nuestra vida. La vamos creando con lo que somos, luces y sombras en contraste. El estilo que me interesa y me conmueve, en un creador, es su manera particular de crear y sentir su propio camino vital.

Las pinturas que os presento son las estelas que quedaron marcando mis Caminos vitales más intensamente sentidos, estos son los tesoros que encontré por el mundo.

Gracias a tantos y tantas Ayudadores, al Camino y a la Vida.

A Ellos, y a los presentes y futuros Caminantes de la Intensidad, dedico y entrego esta obra.

Manuel Castelin, Primavera 1993, Vigo.