Filo CICLIÓFOROS


  CICLIÓFOROS. Es el último de los filos animales descubiertos  y está integrado por una sola especie: Symbion pandora. Ha sido descrito en 1995 por los zoólogos daneses Peter Funch y Reinhardt M. Kristensen, de la Universidad de Copenhage; el último de estos autores lo es también del penúltimo filo publicado, el de los loricíferos (1983), descubierto en Roscoff, Bretaña. El hallazgo de este curioso organismo epizoico microscópico, que vive como comensal sobre las piezas bucales de la cigala común (Nephrops norvegicus), puede considerarse el descubrimiento zoológico más importante de la última década del siglo. Existen tres formas adultas, una alimentaria (el individuo asexuado) y dos reproductoras (el macho y la hembra). La boca de los individuos asexuados de Symbion pandora es como un embudo rodeado de una corona de cilios filiformes que se utilizan para recoger el alimento, y que da el nombre al grupo (de cyclion=rueda pequeña, y phoros=llevar).  Los adultos asexuados tienen forma de botella, alcanzan los 350 micrómetros de longitud y están recubiertos por una cutícula. Son sésiles y viven adheridos a las cerdas bucales de la cigala gracias a un fuerte disco basal que poseen en el extremo del pie; tienen el ano en la base del embudo bucal (tubo digestivo en U). Presentan tanto reproducción asexual como reproducción sexual. En el interior de su cuerpo engendran una forma larvaria (pandora) que contiene a su vez, otra larva preformada. Cuando la pandora es liberada se desplaza a otro lugar de la misma cigala transformándose ella en un individuo aadulto asexual y su larva interna en otra pandora. Este ciclo continua hasta que la cigala que las aloja se dispone a completar la muda, momento en el que las formas asexuadas engendran en su interior formas sexuadas carentes de tubo digestivo. Los machos, que miden unos 85 micrómetros de largo, abandonan los individuos asexuados que los albergan en busca de otros que contengan hembras. Cuando los encuentran se fijan sobre ellos y fecundan a las hembras que portan. Éstas, mayores que los machos y dotadas de una corona de cilios con función fijadora, abandonarán después las formas asexuadas que las originaron y liberarán la larva cordoide, que así se llama la que resulta de la reproducción sexual. La larva cordoide  buscará una nueva cigala como hospedador para desarrollarse sobre ella  hasta alcanzar el estado adulto asexual. Presentan los ciclióforos afinidades con los endoproctos y como ellos se clasifican entre los eumetazoos bilaterales y seudocelomados (se ha sugerido que los ciclióforos bien pudieran ser formas paedomórficas de larvas de endoproctos que han sufrido progénesis).