La Medicina "no" Alternativa", y sus defectos.

En las curas no científicas deben ser investigadas al menos tres formas. La primera es la simple cura por la divinidad en forma directa, milagro o sanación sin más por obra y gracia del mismísimo dios de turno. Sea éste quien sea para comodidad de los creyentes. Éste tipo de curaciones tiene como primera instancia una dolencia aparentemente incurable que el creyente ha tenido por un tiempo y no ha conseguido luego del diagnóstico una forma científica, posible, racional, aparente de cura.

La segunda es generalmente un tanto más rebuscada, aquí tratamos con el tipo clásico de embauco que se genera luego de una visita o una oración un poco más "orientada" al "conocido" con influencia de turno, (algo muy común y creíble para cualquier ser del ambiente político Argentino-Uruguayo), osase: la virgen de Lourdes o san Agustín de los Mburucuyás. Que se hace cargo de los ruegos del solicitante. Es curioso como viene a la mente la cita de Borges... Cómo no! "P: ¿Qué piensa de la oración? R: No sé, pero creo que no me interesa un dios tan corrupto que acepta sobornos..."

En tiempo cercanos, la influencia ha entrado al orbe de los seres contemporáneos, y desde la niñita milagrosa cristiana del Brasil al Sai Babosdo; todos efectúan algún tipo de "magia espiritual" que modifica el alma. el aura o el espíritu, (si tales cosas son concebibles), que compensan semiproblemas en el cuerpo y producen la sanación. (Sea esto lo que quiera que signifique para el creyente , (crédulo?) de turno.

Una tercera y ambigua clasificación admitiría a los reencarnados grandes médicos del pasado, desde criminales de guerra nazi arrepentidos, hasta el mismísimo Imothep, pasando por aventurados seres que operan a distancias enormes, (sin contacto con el paciente, no vaya a ser que la legislatura moderna los afecte por ejercicio ilegal de la medicina), hasta el uso de piedras y talismanes que afectan con su característica única la esencia del ser y por tanto su manifestación física en este universo.

El único problema hasta aquí, con todas las medicina no convencionales, es la prueba según el método científico.

Los muestreos probabilísticos y las pruebas a doble ciego.

Cuando usamos las herramientas de la ciencia la única medicina efectiva es la medicina científica.

El hecho a tener en cuenta es que desde las filipinas a los chamanes rusos no existe ninguna medicina más efectiva que la ciencia médica del cordial y viejo "matasanos" al que llevamos a nuestros hijos o al que vamos por nuestros achaques. O al que van los más grandes curanderos cuando "las papas queman".

El "mal de ojo", la "culebrilla" y los ensalmos "pa' las verrugas" serán todavía por un tiempo parte de nuestra cultura a medio camino de la piedra y el "silicon chip". Ningún médico que se precie descarta sin más medicinas "alternativas", (Ej. histórico semireciente, ver Rayos de Roentgen ;-)...), pero es realmente comprometido con la ética y el respeto por la vida asegurar barbaridades con respecto a pseudociencias como la homeopatía y la acupuntura, o a otras necedades espectacularmente fantasiosas como las tres anteriormente enumeradas.

El hecho, comprobable, incontrovertible y absoluto es que no existen evidencia demostrables de curaciones de ningún tipo que no sean las abaladas por la medicina real.

Como plus de algunas supuestas curaciones religiosas que he visto por allí me queda el de un joven de medio oriente que está severamente lisiado y ahora resulta que el pobre malcamina con ayuda de unas muleta especiales.

¡Caramba, si yo fuera dios, lo hubiera dejado en mejor estado!

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